Renovarse o morir.
Se escucha esa frase por todos lados, pero realmente pocas veces le prestamos atención, hasta que estamos tan sumidos en cosas viejas y estancadas que no se vuelve un consejo, sino una orden.
Músculo que no se usa, se atrofia. Cerebro que no se fuerza un poquito más cada vez, se va haciendo flojo y perdiendo sus capacidades. Energía que no fluye, se estanca y no nos deja movernos hacia ningún lugar.
Por eso, seguramente, estos días han sido días de muchos cambios para mí. Si me he de enfrentar a una responsabilidad tan grande como es ya empezar a trabajar de manera formal, no podía hacerlo con una actitud mental y física como la había estado teniendo.
Eeeentonces, viene la renovación que no es opcional, sino menester: asimilo poco a poco a Carlos sin obsesionarme, me corté el cabello y me quité la barba, estoy conociendo gente nueva (y perspectivas nuevas de la vida), mi guardarropa se va llenando poco a poco de camisas, y me voy a echar encima la responsabilidad de pensar en posts nuevos para este blog después de un buen rato de no escribir en Oishiisama (que dicho sea de paso, es un proyecto ya muerto, pero que no se si conservar o no) .
Me va a costar trabajo (estoy muy oxidado y ésa nimiedad de la coherencia no se me dió en este primer post) pero lo iremos sacando.
Por lo pronto, estoy estructurando un post acerca de lo que pasó el domingo pasado con mi prima y su novio francés, en la presentación oficial ante la familia.
No saben qué divertido...
Saludos.
Oyendo: Alan Parsons Project - Eye in the sky
Se escucha esa frase por todos lados, pero realmente pocas veces le prestamos atención, hasta que estamos tan sumidos en cosas viejas y estancadas que no se vuelve un consejo, sino una orden.
Músculo que no se usa, se atrofia. Cerebro que no se fuerza un poquito más cada vez, se va haciendo flojo y perdiendo sus capacidades. Energía que no fluye, se estanca y no nos deja movernos hacia ningún lugar.
Por eso, seguramente, estos días han sido días de muchos cambios para mí. Si me he de enfrentar a una responsabilidad tan grande como es ya empezar a trabajar de manera formal, no podía hacerlo con una actitud mental y física como la había estado teniendo.
Eeeentonces, viene la renovación que no es opcional, sino menester: asimilo poco a poco a Carlos sin obsesionarme, me corté el cabello y me quité la barba, estoy conociendo gente nueva (y perspectivas nuevas de la vida), mi guardarropa se va llenando poco a poco de camisas, y me voy a echar encima la responsabilidad de pensar en posts nuevos para este blog después de un buen rato de no escribir en Oishiisama (que dicho sea de paso, es un proyecto ya muerto, pero que no se si conservar o no) .
Me va a costar trabajo (estoy muy oxidado y ésa nimiedad de la coherencia no se me dió en este primer post) pero lo iremos sacando.
Por lo pronto, estoy estructurando un post acerca de lo que pasó el domingo pasado con mi prima y su novio francés, en la presentación oficial ante la familia.
No saben qué divertido...
Saludos.
Oyendo: Alan Parsons Project - Eye in the sky
Comentarios
JL