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Fin de semana de puente

-Viernes-

Para empezar bien mi fin de semana largo (el del puente del 5 de febrero), había quedado con Carlos (mi ex) y Sharon (amiga de Carlos) de ver una película en mi casa cuando Sharon saliera de trabajar. En la tardecita Sharon me llamó para decirme que no había tenido noticias de Carlos y que "no le había avisado todavía", entonces no tenía idea. Le marqué ipsofacto al otro para saber qué pasaba y me contestó parecido: "Pues como no me hablaron, no sabía". Vaya interés de los dos y vaya inicio de fin de semana.

Para variar, organicé el asunto y quedé con Carlos que él pasaría al trabajo de Sharon y de ahí los recogería a los tres (su sobrino iría también). Pero, como para empezar el fin de semana con harta emoción, Carlos se conecta más o menos a la hora a la que tendría que estar saliendo para con Sharon y me avisa que APENAS va a investigar unas cosas que necesita de su cuñada, que no podrán llegar a tiempo y que si podemos pasar por ellos. Yo casi me muero, pues me choca que me cambien los planes a última hora, pero me apuré para poder llegar con Sharon a tiempo y poder ir por ellos temprano, pues todos teníamos cosas que hacer el sabadito.

Llegué con Sharon y todo parecía normal, pero se me olvidó que era viernes, y el Eje 8 sur estaba atascado, y a Sharon se le ocurrió la brillante idea de irnos por el Eje 6, que "estaba vacío".

Hicimos cerca de dos horas.

Cuando llegamos por ellos, ya eran cerca de las 11 y yo estaba histérico, no quería que nos agarraran las prisas y bueno, temprano no era. Pero todo estaban más o menos tranquilos, así que yo también le bajé al estrés para disfrutar la película.

Vimos "La leyenda del Tesoro Perdido", con palomitas y toda la cosa. Mi papá (que no estaba... ¿a las 11 de la noche?) nos había dejado además unos chicharrones con limón y refresco sobre la mesa. Empezamos todos muy decentes sentaditos derechos, y acabamos acostados con cobijas, dos bolsas de palomitas y los chicarrones en la panza, y hasta con la gata en las piernas. Pero con todo, no se quisieron quedar.

Fui a dejarlos y regresé cerca de las 3am. Y mi papá todavía no había regresado.


-Sábado-

Mi papá llegó a las 7:30am. Había estado desde las 9 de la noche con una vecina y "se les fué el tiempo platicando". La verdad es que le creo, pues a ésta vecina le dan las 4 de la mañana platicando todos los fines de semana. Mandé a mi papá a dormir (pues iban a ir él y Arturo a casa de mi abuela) y yo también dormí otro ratito.

Desperté cerca de las 9, y me puse a recoger el desorden de la madrugada. No hubo ensayo, e iba a aprovechar la mañana en irme a cortar el cabello a una estética que mi amiga Gra me había recomendado, hasta Zona Rosa. Salí de la casa cerca de las 12 y ni mi hermano ni mi papá se habían despertado todavía.

Llegué a Zona y con un poco de miedo entré a la estética. O bueno, estética-cafetería-antro: Enrique Bricker evidentemente es una estética, pero todo mundo (señoras copetonas, niñitas fresas, jotas, no jotas, chicas guapas, metrosexuales y demás) tomaba café de Starbucks o platicaba con el de al lado a gritos, pues el ambiente estaba amenizado con música electrónica light como si fuera un barcito tempranero. A decir verdad, me apabulló un poco el ambiente y sentía que no iba a encajar y ya hasta me estaba rajando, pero me vendieron tan bien el lugar y el cambio de imagen que decidí aventurarme a ver qué pasaba.

Me recibieron con un "¿quieres tomar algo?" y estuve a punto de contestar un "no, en realidad venía a la estética, gracias" pero lo reprimí. Me pusieron una batita como de baño pero coquetona (cortita hasta medio muslo) para irme a lavar el cabello, y después me pusieron una toalla en los hombros, acto seguido me indicaron sentarme exactamente en el primer lugar de la estética, a un lado del ventanal que da a la calle.

Entonces ahí estaba yo, con batita, toalla en los hombros y el cabello mojado, a la vista de todos los paseantes, pensando una vez más que quizá no debí haberle hecho caso a mi amiga.

Pero atrás de mí había una cajonera que un chavito de ojos muy bonitos y sonrisa de ésas que derriten estaba usando muy a menudo. Aunque cada vez que él iba me veía y se sonreía conmigo, no me animaba a hacerle la plática, hasta que un ligero empujón de la cajonera nos orilló a empezar a platicar... pero justo en ese momento me pasaron a cortarme el cabello. Mala suerte, quizá en el siguiente corte (si es que vengo de nuevo).

Pasé con una chica muy simpática, que me hizo plática rápidamente y así, entre ella y las sonrisas del otro chico (que me seguía dando vueltas) se fueron rápido los 45 minutos que duré allá adentro. La chica no me hizo mucho caso cuando le pedí un corte "moderno, cortito, pero que me pueda llevar a la oficina" y me hizo un corte de ésos que se usan ahora estilo almohadazo que, sin embargo, no se veía mal. El raro era yo, que soy un poco conservador en las cuestiones de la moda y no acababa de decidir si me gustó o no.

Pero el peinado pasó la prueba. Saliendo de la estética-cafetería-antro, me fuí corriendo a casa de una amiga para celebrar su cumpleaños con una carne asada. Llegó toda la bolita de la Universidad y a la mayoría le gustó el cambio. Sólo a dos chicos no les latió tanto, y uno de ellos jugando me jaló el cabello y me tiró el gel. Fui al baño a ver si podía recuperarlo pero no se dejó: opté por peinarlo para atrás y el cabello se acomodó solito. Parece que esta chica tuvo una muy buena mano para cortármelo. Qué bueno que seguí el consejo de mi amiga.

Ahí estuvimos departiendo alegremente (oséase, tragando como cerdos y riéndonos de todo) hasta la nochecita. Cuando todos se estaban yendo a sus casas para arreglarse e irse al antro que ya tenían planeado desde la semana pasada, yo también empecé a despedirme y a las 8:30 ya estaba en mi casita (vacía, pues mi papá y Arturo se habían ido como a las 5 a casa de mi abuela), recién bañado y decidido a copiar el peinadito de salón, pues la chica muy amable me dio las instrucciones para peinarme en casa.

Nunca pude hacerlo de nuevo.

Desistí y me peiné hacia atrás como de costumbre, y me dediqué el resto de la noche a jugar Kingdom Hearts II hasta que llegaron ellos dos, como a la una de la mañana.


-Domingo-

Nos paramos como a las 11. Me bañé y volví a intentar hacerme el peinado despeinado, pero no me salió de nuevo; aunque ésta vez mejor me peiné de otra manera: con copete-fleco que me hace ver muy nerd, pero más chavito. Como el domingo anterior, íbamos a ir todos a casa de un primo mío para seguir armando un rompecabezas que compramos, pero mi papá se sentía mal (con dos desveladas seguidas y gripa, cómo no) y nada más fuimos mi hermano y yo.
Acompañamos a mi primo Mauricio a dejar unas sillas como a media hora de la casa, y luego pasamos al banco a que él sacara dinero, y yo al Centro de Atención Telcel para revisar unas broncas de mi celular... que nos tomaron cerca de dos horas. ¡DOS HORAS para cambiar dos configuraciones! Por mí no había problema, pero como Carlos me había pedido ir a su casa en la noche temí que no nos fuera a dar tiempo de hacer todo y tenía prisa de salir de ahí.

Cuando al fin pudimos salir, todavía comimos en casa de Mauro y como a las 6 de la tarde AL FIN pudimos continuar con el rompecabezas. Acabé por cancelarle a Carlos por teléfono, pero le prometí llegar a las 10am al siguiente día para ir a desayunar. Con menos pendiente, estábamos armando el rompecabezas muy a gusto cuando le hablaron a Mauro al teléfono y el invitó a un amigo suyo a llegarle a su casa para lo del rompezcabezas.

Andrés, el amigo, es flaquito, risueño, de lentes de pasta y facha desgarbada (sudadera y playera negras, pantalones de mezclilla y tenis Converse de botita) y una voz penetrante de ésas que me gustan a mí, con el plus de un carácter muy amable: De aquí soy, me dije a mí mismo. Pero había que sondear el terreno discreta, sutilmente, sin que Mauricio se sintiera amenazado ni Andrés supiera que yo tenía el modo investigador activado.

Lo primero que supe es que los rompecabezas le aburren. De modo que cambiamos de juego (además, el rompecabezas parece que está incompleto) y empezamos a jugar Jenga, terminando con Dominó cubano. En el transcurso, supe su edad, gusto musical, lugar de residencia, familia, cumpleaños, etc. Y todavía no sabía si podía o no clavar mis fichitas ahí.

Cuando terminamos nuestro partido, salió el peine: Mauricio le había dicho que saldrían a algún otro lado y sólo por eso había venido. Mauro, claro, se hizo ojo de hormiga (se estaba durmiendo), pero entre Arturo y yo empezamos a joder para que se subieran los dos en un coche a la aventura. Mauro se nos quedó viendo con carita de "Ah, que bonitos muchachos", pero salió en un lunes a las 2 am a buscar algún bar abierto.

Como pilón, para avisarle que ya habíamos llegado a la casa, Mauro me dió el número de celular de Andrés porque él ya no tenía pila.

Dicen que si la vida te da limones...


-Lunes-

Como lo prometí, estaba a las 10 de la mañana en casa de Carlos. Me dijo que me veía raro con el corte de cabello pero por la cara que hizo creo que le gustó. Para variar, no tiene capacidad de decisión y me dijo que fuéramos a desayunar a donde yo quisiera. Fuimos a probar suerte a Los Bisquets, pero estaba lleno, y propuso pasar a conocer una plaza nueva que acaban de construir ahí cerca.

Parque Tezontle es una plaza muy grande, con varias marcas de nombres grandotototes, y (sin ofender) quizá es el primer mall en forma del Oriente de la Ciudad. Es del grupo que dirige Parque Delta, imagínense. Pero no había nada abierto, ni el área de comida rápida.

Estuvimos baboseando en las tiendas aún cerradas, y dentro de la plática salió que él había quedado de conocer esa plaza con su actual, y que lo que había pasado conmigo y Parque Delta había quedado saldado con ésta visita fugaz.

Recordarán que hace unos post puse que no había podido ir a conocer Parque Delta con él porque Jesús me lo había ganado. Sin querer, me cobré con la misma moneda, pero en realidad no sentí nada especial... la venganza no es buena y usualmente no va conmigo. Pero me extrañó que él tuviera tan presente el incidente, a casi dos años de haber sucedido. ¿Podría ser que...? No, no quiero ni pensar en ello.

El cumpleaños de su hermana fue el domingo, y coincidió con que pasamos enfrente de un Krispy Kreme con el hecho de que ella quería probar las donas de ahí. Le compramos una docena y nos robamos dos donas para platicar mientras decidíamos (todavía) dónde comer.

Acabamos en el coche platicando de los temas de siempre y algunos nuevos, pero por alguna razón rara, no me puedo quitar de la cabeza (aún hoy jueves) que él estaba nervioso de estar platicando conmigo en el coche. Me levanta el ánimo saber que todavía puedo provocar nerviosismo en las personas, pero no me gusta que precisamente sea ÉL de quien tenga que verlo.

Total, no desayunamos nada. Con la dona fue más que suficiente, y lo regresé a su casa (con todo y la docena que ya no era docena) cerca de la una de la tarde para ir a comer a mi casita.
De regreso, una amiga me mandó un mensaje para saber si íbamos a ir al cine o no. Había quedado con ella desde el jueves, pero como no vi movimiento no pensé que ella se acordara y, a decir verdad, contaba con ese tiempo para poder seguir jugando (lo que, según, haría todo mi fin de semana). Le dije que sí pues hacía mucho que no la veía, pero quedamos después de comer.

Comí en la casa, y con toda la flojera del mundo, llegué al punto de reunión. Violeta está cada vez más flaca, y me dio mucho gusto verla. Pero como si de una maldición se tratara entre todos mis amigos, ella (también) está sufriendo por un chico. Bueno, en su caso, un señor casado que trabaja (junto con la esposa) donde Viole trabaja también.

La he visto mal por amores, pero ésta ocasión la pobre no tenía descripción para su cara: mezcla entre coraje, decepción, depresión, autoflagelación y no se que otras cosas más. No sabía que decirle más que levantarle el ánimo y hacerla reír. Un helado antes de la función y varias bromitas hicieron que el gesto se le fuera borrando de a poquito.

¿Por qué no? Nos metimos a ver "Antes de partir", para sufrir a gusto. Había oido muy buenas críticas de ella (y también que varias personas salieron llorando a moco tendido) y no era la película que yo hubiera elegido para el momento en que Viole está, pero ella la eligió y ni modo.
Que gran película. En serio, maravillosa. Dos grandes actores que no necesitan de alguien más para llenar la pantalla, y una historia que -sí, era verdad- te hace un nudo en la garganta. Yo recordé a mi mamá y si se me salió una lagrimita, pero traté de ser fuerte para Violeta, que (¡maldita sea!) no lloró absolutamente nada.

Pero eso no significa que no se le haya aflojado el cuerpecito, y que para sentirse mejor haya necesitado un gran abrazo. Pobre, en serio, no me gustaría estar en su lugar.

Nos despedimos, y me regresé a la casa como a las 10, a ver si ahora sí me dejaban jugar.Pero en lugar de eso, me puse a ver Atlantis, otra película de mi lista de súperatrasadas que no había visto. Terminé a la 1am, sin sueño, pero tenía que dormir para poder aguantar lo que pintaba para una semana pesada. Y no me equivoqué.

Y pues así fue mi fin de semana de puente, que se suponía era para descansar pero sin temor a equivocarme, estuvo más cansado que una semana normal de trabajo.

PD.- ¿Adivinen quién habló a la casa a las 9:30 de la noche del lunes?


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Oyendo: Record of Lodoss War - Knight's theme

Comentarios

Unknown dijo…
Como te lo he dicho mil y un veces.....no te gusta decirles NO cuando estás cansado o simplemente tienes hueva...creo que deberías regalarte un fin de hueva tirado en tu cama jugando KH II.
Oscar dijo…
...el que viene cada mes?
Jeje, como siempre, estoy con una sonrisota leyendo tu blog y a ratos me carcajeo de las cosas que escribes, pq son el claro reflejo de tu vivencia nagai-shuu-matsu-al...
Pues qué cosas, no? Yo tuve un fin de semana acapulquesco, que no tenía desde hace mucho. Lo disfruté!
Curioso es que sigue pendiente una patinada con Lina, entre otras cosas...
Muchos saludos, Toñito y espero tener disponible ese DVD de 宇多田・ヒカル que tanto quiero ver (6)
Anónimo dijo…
... cuando habra nuevas actualizaciones???

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