¡Me pongo de pie! Una amiga mía de la empresa y con quien me llevo de pelos, para escribir utiliza el nombre de su mamá y se llama a sí misma Tina Guel. Pues bien, resulta que ella me ha confiado parte de los poemas que ha escrito (uno lo escribimos entre los dos) para publicarlos aquí. En espera de que David le haga la página que le prometió, disfrutemos con los sinsabores del amor de esta regiomontana que igual se queda viendo al cielo que recuerda sus diabluras con una sonrisa. --- La luna y nosotros dos. ¿De qué quieres escribir? ¿De los amores furtivos? ¿De los amores ausentes? ¿De los amores que aún no llegan a tu vida? ¿De las letras poéticas que esperan ser descubiertas por ti? ¿De los besos que tiene para ti tu princesa? No... no. Esta noche no escribiré nada Sólo miraré a la luna y pensaré en tu nombre que tanto me gusta... y tanto me aterra. Te diré que te quiero, aunque no me oigas; te diré que te extraño, aunque no te importe; te diré que eres mía, aunque no sea cierto. T...
Vida, obra y milagros del hijo pródigo de Coapa.