Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando las entradas de marzo, 2012

La triste (y verdadera) historia del pastel salado

Ya se, ya se. Si el blog fuera un lugar físico tendría telarañas y una capa de tierra que Dios guarde la hora. Pero no es momento de quejarse. Vengo a contar una historia que, con suerte, encuentran entretenida a pesar de la falta de práctica para escribir algo que no sea técnico. Ahí me cuentan en los comentarios. --- El sábado de la semana pasada que regresé de una función estaba la mesa de la sala llena de utensilios de cocina y harina por todas partes. Cuando saludé salieron mi hermano y su novia de la cocina y fue cuando me enteré que estaban cocinando un pastel. La verdad es que me dio mucho gusto porque el muchacho cocina rico, así que mientras platicaba con ellos y descargaba la maleta del vestuario estaba con un ojito en el pastel y otro en mi maleta con camisas sudadas. No bien salió el pan del horno se dejó oler un aroma a pan de chocolate delicioso que a cualquiera se le hubiera antojado, aunque todavía tenía que enfriarse. Y yo nomás dándole vueltas pero