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Mostrando las entradas de agosto, 2015

Libélulas

Hace algún tiempo estuve en un grupo de danza con el que tuve la suerte de conocer Corea del sur debido a un concurso internacional acompañado de una pequeña gira por varias ciudades. La ciudad sede del concurso, Cheonan, está llena de jardines y parques y la mayor parte de las actividades se harían al aire libre para aprovechar los foros amplios. La gira ya fue reseñada ampliamente en Twitter con correspondencia en Facebook y en este su blog suyo de ustedes. Pero lo que viene a continuación no lo había puesto hasta hoy. En el segundo día que llegamos a esa bonita ciudad nos llevaron a reconocer el espacio donde serían las presentaciones finales, claro, en medio del parque más grande del lugar, Samgori. Entre mediciones de entradas y salidas, selfies y fotos de las flores salió de atrás de una fuente una libélula de escamas tornasol. Cuando una amiga la señaló, el director se limitó a decir " Son de la suerte. No se les vaya a ocurrir molestarla, déjenla volar " y como s

¿Más vale solo?

El lunes de hace dos semanas me diagnosticaron en la oficina con rinofaringitis alérgica, que para como me sentía yo pensé que era un eufemismo de " te quedan dos semanas de vida ". Tanto así, que el día siguiente no fui a trabajar y básicamente fui un mueble consumekleenex de mi casa. Ese mismo martes mi familia me suelta la noticia de que como a mi hermano le dieron vacaciones en el trabajo se iban a ir tres días fuera empezando... el miércoles . Si yo hubiera tenido 10 años y 400 antibióticos menos el viernes hubieran encontrado mi casa peor que la del proyecto X. Pero no. Entre la temperatura y mi sentido de la responsabilidad hice mi rutina tal como todos los días: pararme 5:30 a.m. y regresar cerca de las 8 p.m. a dar de cenar, cenar yo, lavar los tres pinchurrientos trastes que usé, preparar mis cosas del otro día y llorar en mi cama quedarme dormido viendo una película. Sin embargo, debo reconocer que tres días de vivir solo me recordaron que del otro lado del mund